Para decir con dios, nos sobran los motivos
Hace unos años un amigo mío se mudó.
No demasiado lejos.
Estaba a menos de 2 horas.
Pero pasamos de vernos todas las semanas a que no hablásemos en meses.
Casi un año después de que se mudase fui a visitarle.
Iba enfadada.
Le recriminé que había pasado por completo de mí y estaba dolida.
Me dijo con toda la naturalidad del mundo que, para él, aquella época solo había sido una fase de su vida y que ahora estaba en otra.
Yo no entendía muy bien lo de las fases de la vida, la verdad. Y quizás aún me cuesta.
Sabía que aquello para mi no era una fase.
Sin embargo, ahora siento que sí que estoy empezando una nueva y que tengo que dejar ir algunas cosas. Con lo que cuesta dejar ir…
Cuando empecé a escribir estas reflexiones en septiembre del año pasado, lo hice por 2 razones principalmente:
Porque me gusta experimentar y quería hacerlo con esto.
Porque estaba cansada de escribir sobre marketing y comunicación.
Empecé a crear contenido aquí con muchas ganas, pero unos meses después lo estaba haciendo como una obligación.
Otra más.
Así que, con esta pausa he estado reflexionando y creo que el problema no era el tipo de contenido que estaba creando, sino el hecho de crear contenido.
El tener que estar siempre a la altura de las circunstancias. Llueva o haga sol.
Crear algo lo suficientemente bueno para que la gente quiera seguir leyendo. Estés de humor o no.
Y pienso que ha llegado el momento de dejar esa fase atrás.
Me apetece mucho menos autoimponerme cosas.
Me apetece muy poco estar bajo el escrutinio de quien me lee.
Quizás ha llegado el momento de escribir un poco más para mí y menos para los demás.
O quizás es el momento de una pausa de escribir un poco más larga.
Desde 2016 que empecé a crear contenido, no he parado más que unas simples semanas al año. Quizás necesite algo más.
La verdad es que no lo tengo muy claro, pero sé que me apetece estar un poco más hacia adentro y centrarme en algunas de las cosas que tengo pendientes desde hace mucho, como pintar o estudiar inglés.
Crear contenido come bastante tiempo, pero sobre todo es agotador sostenerlo en el tiempo, al menos para mi.
Así que, por el momento no voy a borrar esto, porque siempre da un poco de miedo quemar las naves.
Pero si voy a parar.
No sé si por un tiempo o quizás después de unos meses decida eliminarlo. Pero sé que voy a centrarme en otras cosas y tratar de agobiarme un poco menos con todos los “debería”.
Al fin y al cabo, mi propósito para este año era agobiarme menos y casi a mediados de julio podría ponerme una nota de un 0. ¿Mejoraré la puntuación de aquí a final de año? Ni idea. Quizás lo cuente, quizás no.
Por cierto, la fase de mi amigo no era tal cosa. Hablamos de vez en cuando y nos vemos cuando podemos.
Así, ¿quién sabe qué será esto?